En honor a la Virgen Asunta, Mons. Richard Daniel Alarcón Urrutia, Arzobispo Metropolitano del Cusco, presidió una Solemne Misa en el atrio de la Parroquia San Juan Bautista de Coya el pasado lunes 15 de agosto, donde acompañaron el Pbro. Octavio Casafranca Mamani, párroco de esta parroquia, junto al Pbro. Holger Choquecondo Vera, Vicario Parroquial de la Parroquia Santiago Apóstol de Lamay, quienes concelebraron esta celebración eucarística a la que concurrieron autoridades, mayordomos, danzantes y feligreses.

Danzantes y peregrinos se reunieron para poder celebrar con jolgorio la salida de la Virgen Asunta, quien, tras dos años de pandemia, por fin pudo celebrar su fiesta en el distrito.

Aunque en este tiempo haya habido cosas malas hay que tener presente que la Virgen nos dio la fortaleza para continuar, hay que agradecer a Dios por cada día de vida y por el amor que nos brinda. El mensaje de la Virgen este 2022 es: Nunca te olvides de tu fe en Dios, nunca te olvides que Dios te ha creado, no para vida ni para la muerte, te ha creado para el cielo y la felicidad eterna, fueron las palabras que Mons. Richard Daniel Alarcón U. expresó durante su homilía.

La Asunción de la Virgen María, nos recuerda que la Madre de nuestra Iglesia, fue fiel a la voluntad de Dios, y ella, hasta el día en que fue llevada al cielo, no cometió ningún pecado. Por esa razón, como buenos cristianos, debemos cumplir con nuestro deber: servir a los demás con amor, luchar con todo aquello que sea contrario a la enseñanza de Dios y ganarnos el cielo teniendo una vida correcta. Pidamos a María por su intercesión, porque ella se lo pide después a Jesús y Él no niega al pedido de su Madre porque también es nuestra Madre. 

Al terminar la Santa Misa, las imágenes de la Virgen Asunta, fueron sacadas en procesión por los alrededores de la plaza central del distrito de Coya y la acompañaron diversas comparsas de danzas y mayordomías quienes llenaron de alegría esta fiesta.