El Centro Poblado de Amparaes se unió en un acto conmovedor el domingo 15 de octubre. El Arzobispo Metropolitano del Cusco, Mons. Richard Daniel Alarcón Urrutia, encabezó una emotiva Santa Misa en honor a la Virgen Purificada, patrona de este centro poblado de Calca. La ocasión se tornó aún más significativa al conmemorar el aniversario de constitución canónica de la Parroquia Nuestra Señora Purificada.

La liturgia fue también el escenario para la bendición de un recientemente adquirido y espléndidamente ubicado altar. Este logro fue resultado de los esfuerzos conjuntos del municipio, la parroquia y el respaldo del Arzobispado del Cusco, a través del Padre Oscar Delgado. Este altar, compuesto por dos cuerpos, un ambón para la lectura de la Palabra y una mesa para la consagración del Cuerpo y la Sangre de Cristo, simboliza la devoción y el compromiso de esta comunidad hacia su fe.

En su homilía, Mons. Richard Daniel destacó la celebración en Amparaes en honor a la llegada y entronización de nuestra Madre, la Virgen Purificada, quien ha sido declarada como patrona de toda la comunidad parroquial. En sus palabras, expresó que esta reunión es una ocasión para agradecer a Dios y resaltó el regocijo de nuestra Madre, quien, adornada con belleza, se siente especialmente contenta al ver a sus hijos reunidos. Como cualquier madre, siente felicidad al ver a sus seres queridos congregados y aprovechó la oportunidad para recordarnos su deseo de que la Iglesia Católica siga siendo un pilar en el centro poblado de Amparaes.

Mons. Richard también compartió la parábola del rey y su banquete, subrayando la importancia del primer banquete que Dios nos ofrece, una invitación a sentarnos a Su mesa donde nos espera un banquete espiritual. Hizo hincapié en la relevancia de asistir a misa y nutrir nuestra fe a través de la Palabra de Dios. Finalmente, nos instó a reflexionar sobre la constante invitación de Dios para unirnos a Su banquete cada domingo, fortaleciendo nuestra fe mediante la eucaristía.

Este día, en particular, marcó una ocasión especial para los jóvenes y niños de la parroquia, ya que recibieron el sacramento de la Primera Comunión, un paso crucial en su camino de fe. Las miradas radiantes de estos nuevos comulgantes iluminaron la celebración, recordándonos la importancia de guiar a las generaciones futuras en su relación con la fe.

El culmen de esta emotiva celebración estuvo marcado por un gesto especial del Centro Poblado de Amparaes. El alcalde de la localidad Prof. Rómulo Cruz, acompañado por sus regidores, otorgó a la Virgen Purificada los títulos de "Protectora y alcaldesa Vitalicia de Amparaes," honrándola con una banda y una medalla como símbolo de su importancia en la vida de esta localidad. Una unión entre fe, devoción y comunidad que trasciende lo religioso, recordándonos la importancia de nuestras raíces y creencias en nuestras vidas cotidianas.

Al final de la celebración eucarística, comparsas, grupos de danzarines y mayordomos le dedicaron alegres coreografías en el Atrio del Templo, llenando el aire de música y alegría, en un tributo festivo a su patrona y una celebración que refleja la unión y la cultura de esta comunidad